Una de las cosas más curiosas relacionadas a Fortnite está pasando. Varios padres han estado contratando una serie de tutores para que sus hijos fanáticos al juego puedan mejorar su habilidad y poder encajar en un estatus social con su entorno.

Y es que no obstante las críticas al videojuego sobre volver a los más pequeños violentos, existe un grupo de padres que piensa de manera competitiva y motiva a sus hijos a reforzar sus actividades con las cosas que les gustan. Tanto así, que hace un par de horas comenzó a circular la voz sobre un cierto grupo de personas que está contratando entrenadores personales para que sus hijos mejoren en el juego.

Fue a través de una publicación realizada en el Wall Street Jorunal, escribió en una columna que encontró algunos servicios muy lucrativos, en los que algunos padres están pagando de 10 a 20 dólares por hora, para que un entrenador venga a casa a enseñarle a jugar bien a sus hijos y estos sepan cómo ganar en Fortnite.

“Hay presión no solo por jugarlo sino por ser realmente bueno en eso“, dijo una de las madres, quien además pagó no una sino que cuatro sesiones para su hijo menor de tan sólo 10 años, “Puedes imaginar cómo fue eso para él en la escuela“.

Declaraciones que parecen sacadas de un mundo de ensueño, pero que son totalmente verdad. Los padres cada vez se están preocupando más de que sus hijos puedan ser socialmente aceptados en los grupos de las escuelas, y que no haya herramienta que no les puedan dar para que esto no suceda.